viernes, 24 de abril de 2009

Evaaa, en CíDiCì





                                             Que lindos los cuatro ♥

                                             Los quiero tantotanto ☻
                                             Me causa demasiado esta foto ☺
                                             Paaabli y Agus ♥
                                             Eee, wacho, que queré ?


Los QUIERO .-

jueves, 16 de abril de 2009

La mayor frustración es cuando uno sabe todas las respuestas, pero nadie le hace la pregunta.
Me emborraché para olvidarte, pero ahora te veo doble
Dos cosas que odio: el racismo y el negro de acá a la vuelta.
Come pasto, millones de vacas no pueden equivocarse.
El mero hecho de que no seas un paranoico no quiere decir que no todo el mundo te persiga.
No importa donde vayas, siempre estarás allí.
Mi complejo de superioridad es mejor que el tuyo.
Aquellos que creen en la telequinesis, que levanten mi brazo.
Yo solía tener una vida. Luego me compre un módem.
Una imagen vale más que mil palabras. Pero ocupa mucha más memoria.


jueves, 9 de abril de 2009




MI GEMELA con pelo lacio (L

lunes, 6 de abril de 2009

domingo, 5 de abril de 2009

Ji, I ♥ This Girls So Much .

martes, 24 de marzo de 2009

Porfavor lean esto :)

Charles necesitaba desesperadamente ir al baño. Era inútil engañarse pensando que podía esperar al recreo. Su vejiga protestaba desesperadamente, y miss Bird le había descubierto retorciéndose.

Había tres profesoras en el tercer curso del colegio de Acorn Street. Miss Kinney era joven, rubia y llena de vivacidad. Mrs. Trask tenía la hechura de un almohadón moruno, se peinaba con trenzas y reía ruidosamente. Y luego estaba miss Bird.

Charles había sabido que acabaría con miss Bird. Era inevitable. Porque estaba claro que miss Bird quería destruirle. No permitía que los niños fueran al sótano. El sótano, explicó miss Bird, era donde se encontraban las calderas de calefacción, y las señoras y los señores bien educados jamás iban allí, porque los sótanos eran lugares decrépitos y llenos de hollín. Los jóvenes y las señoritas, repitió, no bajan al sótano. Van al cuarto de baño, dijo.

Charles volvió a retorcerse. Miss Bird le miró.

—Charles —dijo mientras señalaba Bolivia con el puntero—, ¿no necesitas ir al baño?

Cathy Scott, que tenía el putitre delante de él, rió cubriéndose prudentemente la boca con la mano.

Kenny Griffen hizo una mueca y le dio una patada por debajo del pupitre. Charles se ruborizó.

—Di algo, Charles —insistió miss Bird—. Necesitas... (dirá orinar, siempre dice orinar)

—Sí, miss Bird.

—¿Sí qué?

—Que tengo que ir al só... al baño.

Miss Bird sonrió.

—Muy bien, Charles. Puedes ir al baño a orinar. ¿Es eso lo que necesitas hacer? ¿Orinar?

Charles bajó la cabeza abrumado.

—Muy bien, Charles. Ve. Y la próxima vez, por favor, no esperes a que te lo pregunte.

Risitas sofocadas. Miss Bird golpeó su mesa con el puntero.

Charles recorrió el pasillo hasta la puerta, con treinta pares de ojos clavados a su espalda. Cada uno de esos niños, incluida Cathy Scott, sabía que iba al baño a orinar. La puerta estaba a una distancia tan larga como un campo de fútbol. Miss Bird no siguió con la clase, sino que guardó silencio hasta que él hubo abierto la puerta, pasado al vestíbulo milagrosamente vacío, y vuelto a cerrar la puerta.

Anduvo hacia el baño de los chicos...

(sótano, sótano, sótano, SÍ QUIERO)

... arrastrando los dedos a lo largo de la fresca tira de mosaico de la pared, dejándolos tamborilear sobre el tablón de anuncios con los boletines pegados con chinchetas y resbalar sobre la...

(ROMPAN EL CRISTAL EN CASO DE EMERGENCIA)

... superficie roja de la caja de la alarma contra incendios.

Miss Bird disfrutaba haciéndole ruborizarse. Delante de Cathy Scott —que nunca necesitaba ir al sótano, ¿hay derecho?— y de todos los demás.

P-e-r-r-a, pensó. Lo deletreó porque el año pasado había decidido que, si deletreaba, Dios no lo consideraba pecado.

Entró en el baño de los chicos.

Dentro estaba muy fresco, con un leve y no desagradable olor a cloro. Ahora, a media mañana estaba limpio y desierto, tranquilo y agradable, no como el maloliente y humoso cubículo del Star Theatre en la ciudad.

El baño...

(¡sótano!)

... estaba construido como una L, la pata corta con una hilera de pequeños espejos cuadrados sobre palanganas de porcelana y un rollo de toallas de papel...

(NIBROC)

... y la pata más larga con dos urinarios y tres cubículos con sus tazas.

Charles enfiló la esquina después de contemplar, aburrido, su rostro delgado y pálido en uno de los espejos.

El tigre estaba echado al fondo, exactamente debajo del ventanuco blanco. Era un gran tigre, con rayas y manchas oscuras en su piel. Levantó la cabeza vivamente para mirar a Charles y sus ojos verdes se estrecharon. Una especie de gruñido, suave como un ronroneo, escapó de su boca. Los ágiles músculos se flexionaron y el tigre se levantó. Agitó la cola y golpeó contra los lados de porcelana del último urinario.

El felino parecía muy hambriento y agresivo.

Charles salió precipitadamente por donde había entrado. La puerta pareció tardar años en cerrarse, neumáticamente, tras él, pero cuando lo hizo se sintió a salvo. No recordaba haber leído u oído que los tigres supieran abrir puertas.

Charles se secó la nariz con el dorso de la mano. Su corazón palpitaba desbocadamente. Seguía necesitando ir al sótano, más que nunca.

Se revolvió y apretó la mano contra el vientre. Tenía que ir al sótano. Si pudiera tener la seguridad de que no se acercaría nadie, podría entrar en el de las niñas. Estaba del otro lado del vestíbulo. Charles lo miró anhelante, sabiendo que no se atrevería ni en un millón de años. ¿Y si llegaba Cathy Scott? Oh, horror de los horrores... ¿Y si la que llegaba era miss Bird?

Quizá el tigre habían sido imaginaciones suyas.

Abrió la puerta lo suficiente para mirar por el resquicio.

El tigre le miró a su vez desde el ángulo de la L, con los ojos de un verde resplandeciente. Charles imaginó ver una minúscula manchita azul en aquel brillo profundo, como si el tigre se hubiera comido uno de sus ojos. Como si...

Una mano rodeó su cuello.

Charles lanzó un grito sofocado y sintió que el corazón y el estómago se le anudaban en la garganta. Por un momento tuvo la terrible sensación de que iba a orinarse encima.

Era Kenny Griffin, sonriendo burlonamente.

—Me ha mandado miss Bird porque llevas años sin volver. Prepárate.

—Sí, pero aún no he podido entrar en el baño —dijo Charles medio muerto del susto que le había dado Kenny.

—¡Estás estreñido! —exclamó Kenny alegremente—. ¡Espera a que se lo cuente a Cathy!

—¡No se te ocurra! —dijo Charles—. Además, no lo estoy. Ahí dentro hay un tigre.

—¿Y qué está haciendo? —preguntó Kenny— ¿Pis?

—No lo sé —murmuró Charles mirando a la pared—. Yo sólo quiero que se vaya. —Y se echó a llorar.

—Eh —dijo Kenny, desconcertado—. ¿Qué te ocurre?

—Tengo que ir al lavabo. Pero no puedo entrar ahí... Miss Bird dirá que...

—Vamos —insistió Kenny, cogiéndole del brazo con una mano y empujando la puerta con la otra—. Te lo estás inventando.

Estuvieron dentro antes de que Charles, aterrorizado, pudiera zafarse y retroceder.

—¡Un tigre! —se burló Kenny-. Chico, miss Bird te matará.

—Está del otro lado.

Kenny empezó a avanzar junto a las palanganas:

—Gatito, gatito... ¡Gatito!

—¡No lo hagas! —chilló Charles.

Kenny desapareció tras la esquina.

—Gatito, gatito... Gat...

Charles salió disparado por la puerta y se apoyó contra la pared, esperando, cubriéndose la boca con las manos, y los ojos cerrados con fuerza.

No se oyó ningún grito.

No sabía cuánto tiempo permaneció allí, paralizado, con la vejiga a punto de reventar. Contemplaba la puerta del lavabo de chicos. Pero no le decía nada. Era sólo una puerta.

No iría.

No podría.

Pero al fin entró.

Las palanganas y los espejos seguían ordenados, y el vago olor a cloro persistía. Pero ahora parecía que había otro olor por debajo de aquél, un olor vagamente desagradable, como de cobre.

Con gemidos de impaciencia pero silenciosos se acercó al ángulo de la L y miró.

El tigre estaba echado en el suelo, lamiendo sus patas con una enorme lengua rosa. Miró a Charles con indiferencia. En una de sus garras había un trozo de camisa.

Pero la necesidad era ya pura agonía, y no podía esperar un segundo más. Tenía que orinar. Se acercó de puntillas a la palangana más cercana a la puerta.

Miss Bird entró como un vendaval cuando él se abrochaba los pantalones.

—¡Vaya, niño repugnante! —le increpó.

Charles, asustado, no dejaba de mirar la esquina.

—Lo siento, miss Bird... el tigre... voy a limpiar la palangana... lo haré con jabón... le aseguro que lo haré...

—¿Dónde está Kenneth? —preguntó miss Bird con calma.

—No lo sé. —Era verdad.

—¿Está ahí dentro?

—¡No! —gritó Charles.

Miss Bird se acercó a la esquina.

—Ven aquí, Kenneth. Ahora mismo.

—Miss Bird...

Pero ella ya había desaparecido tras la esquina. Iba dispuesta a atacar, pensó Charles, pero iba a descubrir lo que era un ataque de verdad.

Volvió a salir por la puerta. Bebió agua en la fuente de la entrada. Miró la bandera norteamericana colgada sobre la entrada del gimnasio. Miró el tablón de anuncios. Mochuelo del Bosque avisaba: GRITAD, PERO NO CONTAMINÉIS. Buen Amigo aconsejaba: NO OS VAYÁIS CON DESCONOCIDOS. Charles lo leyó todo dos veces.

Después volvió a la clase, recorrió el pasillo hasta su sitio con la mirada en el suelo, y se deslizó en su asiento. Eran las once menos cuarto. Sacó Caminos a todas partes y se puso a leer la lección «Bill en el Rodeo»

lunes, 23 de marzo de 2009

fif

ZORRO: Espadachín Justiciero.
ZORRA: Puta. 
PERRO: Mejor amigo del hombre.  
PERRA: Puta. 
AVENTURERO: Osado, valiente, arriesgado, hombre de mundo.
AVENTURERA: Puta
CUALQUIER: Fulanito, Mengano, Zutano.  
CUALQUIERA: Puta 
REGALADO: Adjetivo; participio del verbo regalar.  
REGALADA: Puta 
CALLEJERO: De la calle, urbano.  
CALLEJERA: Puta 
HOMBREZUELO: Hombrecillo, varón, mínimo, pequeñito. 
MUJERZUELA: Puta 
HOMBRE PÚBLICO: Personaje prominente.  
MUJER PÚBLICA: Puta
GOLFO: Masa de agua marina parcialmente rodeada de tierra  
GOLFA: Puta 
LOBO: Mamífero predador rapaz y feroz. Hombre experimentado y agresivo.  
LOBA: Puta LIGERO: Hombre débil y/o sencillo  
LIGERA: Puta 
ADÚLTERO: Infiel  
ADÚLTERA: Puta 'QUE HIJO PUTA': Expresión de 'menuda suerte' 
'QUE HIJA PUTA': Expresión de 'menuda Zorra, ojalá se muera'
PUTIN: Honorable jefe de Estado Ruso.  
PUTINA: Putilla.
HOMBRE QUE VENDE SUS SERVICIOS: Consultor  
MUJER QUE VENDE SUS SERVICIOS: Puta
Bueno, esto tan al pedo, pero que se le va a hacer.

Un dia de escuela común, por ejemplo un Lunes de Marzo, exactamente el tercero es así:

Llego a la entrada, hay unas chicas paveando por ahi, y estaba Tobías buscando a alguien conocido (?) Bueno, entro, un silencio terrible, casi no habia luz debido que eran las 7.10 de la mañana. Un niño aburrido y yo en el gimnasio ese. Pero, doblo y a quien me encuentro, a Sheila Gonzáles, amiga la cual poseía una mochila nueva negra de charol con  detalles en una tela suavecita en color fucsia y rayas negras. Luego, esta me cuenta sus hazañas con su vecina, la cual es algo mayor que ella, y llegamos a una parte que me dijo que se habia golpeado fuertemente la cabeza. Después me cuenta que la mochila le salio ''re'' cara y blah blah blah...
Al cabo de unos minutos llegan las señoritas Luisina Labernia y Valentina Calvella, las cuales me cuentan que era el cumpleaños de la segunda individua (feliz cumple Vale) Saludo a ambas, pero especialmente a la que cumplía años, y luego llegan otras individuas mas, entre ellas Sofía Viani que empieza a cantar feliz cumpleaños, un bochorno (?)

Despues sigo con la segunda parte, me canse.

domingo, 22 de marzo de 2009

Sin duda una de las historias de miedo mas antigua y popular en México es la leyenda de La Llorona, la cual habla de una mujer de blanco que pasea por las calles de la ciudad exclamando ¡Ayyyyy Mis hijos! Tristemente el folclor y la historia en si, se han ido perdiendo con el tiempo a tal grado que llegan a contarla o platicarla de manera lacónica y en menos de 1 minuto como yo lo hice en las primeras letras de este escrito.

Incluso en Internet es difícil encontrar información completa de esta leyenda, una de las páginas con mayor información (www.lallorona.com) esta en ingles (irónico ¿verdad?). Sin embargo existen tantas y tan ricas variaciones de la leyenda que me he propuesto recopilarlas con la intención que no queden en el olvido. Pasemos pues a la Leyenda.

En la época del Ahuizotl (aproximadamente en el año 1502) se avistaba en el lago de Texcoco una figura blanca, casi espectral la cual daba tremendos gritos y lamentos que se extendían en el agua, y se escuchaban en los templos, asi como en el Teocali palacio del emperador Moctezuma o Montezuma:
Los cuatros sacerdotes aguardaban espectrantes. 

Sus ojillos vivaces iban del cielo estrellado en donde señoreaba la gran luna blanca, al espejo argentino del lago de Texcoco, en donde las bandadas de patos silenciosos bajaban en busca de los gordos ajolotes. 

Después confrontaban el movimiento de las constelaciones estelares para determinar la hora, con sus profundos conocimientos de la astronomía. 
De pronto estalló el grito....Era un alarido lastimoso, hiriente, sobrecogedor. Un sonido agudo como escapado de la garganta de una mujer en agonía. El grito se fue extendiendo sobre el agua, rebotando contra los montes y enroscándose en las alfardas y en los taludes de los templos, rebotó en el Gran Teocali dedicado al Dios Huitzilopochtli, que comenzara a construir Tizoc en 1481 para terminarlo Ahuizotl en 1502 si las crónicas antiguas han sido bien interpretadas y parecio quedar flotando en el maravilloso palacio del entonces Emperador Moctezuma Xocoyótzin. 

-- Es Cihuacoatl! -- exclamó el más viejo de los cuatro sacerdotes que aguardaban el portento. 

-- La Diosa ha salido de las aguas y bajado de la montaña para prevenirnos nuevamente --, agregó el otro interrogador de las estrellas y la noche. 

Subieron al lugar más alto del templo y pudieron ver hacia el oriente una figura blanca, con el pelo peinado de tal modo que parecía llevar en la frente dos pequeños cornezuelos, arrastrando o flotando una cauda de tela tan vaporosa que jugueteaba con el fresco de la noche plenilunar. 

Cuando se hubo opacado el grito y sus ecos se perdieron a lo lejos, por el rumbo del señorío de Texcocan todo quedó en silencio, sombras ominosas huyeron hacias las aguas hasta que el pavor fue roto por algo que los sacerdotes primero y después Fray Bernandino de Sahagún interpretaron de este modo: 

"...Hijos míos... amados hijos del Anáhuac, vuestra destrucción está próxima...." 

Venía otra sarta de lamentos igualmente dolorosos y conmovedores, para decir, cuando ya se alejaba hacia la colina que cubría las faldas de los montes: 

"...A dónde iréis.... a dónde os podré llevar para que escapéis a tan funesto destino.... hijos míos, estáis a punto de perderos..." 

Al oir estas palabras que más tarde comprobaron los augures, los cuatro sacerdotes estuvieron de acuerdo en que aquella fantasmal aparición que llenaba de terror a las gentes de la gran Tenochtitlán, era la misma Diosa Cihuacoatl, la deidad protectora de la raza, aquella buena madre que había heredado a los dioses para finalmentente depositar su poder y sabiduría en Tilpotoncátzin en ese tiempo poseedor de su dignidad sacerdotal. 

El emperador Moctezuma Xocoyótzin se atuzó el bigote ralo que parecía escurrirle por la comisura de sus labios, se alisó con una mano la barba de pelos escasos y entrecanos y clavó sus ojillos vivaces aunque tímidos, en el viejo códice dibujado sobre la atezada superficie de amatl y que se guardaba en los archivos del imperio tal vez desde los tiempos de Itzcoatl y Tlacaelel. 

El emperador Moctezuma, como todos los que no están iniciados en el conocimiento de la hierática escritura, sólo miraba con asombro los códices multicolores, hasta que los sacerdotes, después de hacer una reverencia, le interpretaron lo allí escrito. 

---Señor, -- le dijeron --, estos viejos anuales nos hablan de que la Diosa Cihuacoatl aparecerá según el sexto pronóstico de los agoreros, para anunciarnos la destrucción de vuestro imperio.

Dicen aquí los sabios más sabios y más antiguos que nosotros, que hombres extraños vendrán por el Oriente y sojuzgarán a tu pueblo y a ti mismo y tú y los tuyos serán de muchos lloros y grandes penas y que tu raza desaparecerá devorada y nuestros dioses humillados por otros dioses más poderosos. 

--- Dioses más poderosos que nuestro Dios Huitzilopochtli, y que el Gran Destructor Tezcatlipoca y que nuestros formidables dioses de la guerra y de la sangre? -- preguntó Moctezuma bajando la cabeza con temor y humildad. 

--- Así lo dicen los sabios y los sacerdotes más sabios y más viejos que nosotros, señor. Por eso la Diosa Cihuacoatl vaga por el anáhuac lanzando lloros y arrastrando penas, gritando para que oigan quienes sepan oír, las desdichas que han de llegar muy pronto a vuestro Imperio. 
Moctezuma guardó silencio y se quedó pensativo, hundido en su gran trono de alabastro y esmeraldas; entonces los cuatro sacerdotes volvieron a doblar los pasmosos códices y se retiraron también en silencio, para ir a depositar de nuevo en los archivos imperiales, aquello que dejaron escrito los más sabios y más viejos. 

Aquellos hombres de Oriente no eran mas que los españoles dirigidos por Hernan Cortez y despues de la caída de Tenochtitlán tanto aztecas como los pueblos subyugados por ellos sufrirían las mas grandes atrocidades jamas vistas. Las mujeres serían violadas, los hombres asesinados y sus dioses olvidados a excepción de La llorona...

CUACK 2 !
Nunca debes ponerte frente al espejo y repetir nueve veces seguidas el nombre de Verónica. Sé que quizás hayas oído esta historia...Quizás pienses que es mentira y no me creas...está bien, no pasa nada, pero por favor NO TE BURLES DE ELLA ya que puede caer sobre ti una maldición terrible. 

Veronica era una chica de 14 años que haciendo espiritismo en una casa abandonada no siguió las reglas de los fantasmas, se burló durante toda la invocación y una silla que había en la habitación cobró vida y la golpeó mortalmente en la cabeza. Pero la venganza de los espíritus no acabó aquí: Verónica aun no descansa en paz. Su espíritu está condenado eternamente y ahora es ella la que quiere vengarse de todo aquel que no sabe respetar el Mas Allá.

María era una chica que conoció la leyenda en su universidad. Ella era mayorcita para creer en esas estupideces, pensaba ella y se reía. Sus amigos la picaron, ya que si no tan valiente que era no tendría problemas en hacerlo. Fue a un baño, acompañada de una compañera y lo hizo. No pasó nada y el grupo, entre risas, lo olvidó enseguida.

Pero María no pudo olvidarlo. Al hacerlo sintió un escalofrío indescriptible...y su pesadilla comenzó esa misma noche. Tumbada en la cama, despertó por un sonido raro. Era un susurro indescifrable que oía cerca de la nuca. Además sentía como si alguien respirara en su cuello. Asustada, se levantó y encendió la luz. Nada había a su lado. Pero no pudo dormir en toda la noche. 

Al día siguiente, no se atrevió a contárselo a nadie de la universidad aunque aún seguía aterrorizada por lo que le había sucedido la noche anterior. En mitad de la clase tuvo que salir al servicio. Cuando entró al baño, hacía mucho frío y una capa de vaho cubría el espejo. María lo limpió con la mano y vió horrorizada que tras ella había una chica con una expresión de odio y sangre en la cabeza. Cuando se volvió a mirar, ya no había nadie. Rió nerviosamente, pensando que todo era fruto de su imaginación, los nervios y el cansancio. Sin embargo, al volverse hacia el espejo vió algo que la dejo blanca. En el baño había frase escrita: "No debiste invitarme a volver".

María no pudo soportarlo. Encerrada en un manicomio, sólo decía que el fantasma de Verónica la seguía atormentando. No pudo soportarlo y acabó suicidándose.

Yo lo pensaría dos veces antes de meterme con el Más Allá


Cuack !
Sofi con tapado de piel de Bisón y yo, Rocío con uno de Leopardo, Verdaderos 

sábado, 21 de marzo de 2009

     Un
                     Saco 
                  De 
         Huesos
Vean lo hermosas que somos (?






lunes, 16 de marzo de 2009

                    

Patrick Starfish

martes, 3 de marzo de 2009






No me arrepiento de nada ¬

lunes, 2 de marzo de 2009

Yendo hacia la escuela me preguntas

qué otras escuelas son graduadas.

Llego hasta
Fruit Street y apartas los ojos.

Caminando bajo estos árboles
amarillos

llevas bajo el brazo tu fiambrera del ejército, y tus

piernas cortas, enfundadas en ropa de trabajo

transforman tu sombra en unas tijeras

que no cortan nada en la
acera.

De pronto me dices que todos los estudiantes allí son frutas.

Todos prefieren coger
arándanos porque son pequeños.

Las bananas, dices, son los guardias.

En tus ojos veo reuniones de naranjas, y

asambleas de manzanas.

Todos, dices, tienen brazos y piernas

y las sandías son a veces tardías.

Son torpes y gordas.

<
>, dices.

Podría decirte muchas cosas, pero mejor no.

Los niños sandía no saben abrocharse los zapatos;

se lo hacen las ciruelas.

O cómo te robo la cara...

te la robo, te la robo, y la llevaré en lugar de la mía.

Pero sobre la mía se gasta
enseguida.

Lo hace por estirarla.

Podría decirte que morir es un arte

y que aprendo depris
a.

Creo que en esa escuela ya has

elegido tu propio lápiz

y empezado a escribir tu nombre.

Supongo que entre ahora y luego, podríamos

algún día hacer novillos y llevarte a Fruit Street

y yo aparcaría bajo la lluvia de las hojas de octubre

y miraríamos cómo una banana acompaña a la última sandía,

retrasada, a través de ese portal.



(?

miércoles, 21 de enero de 2009

Crepúsculo es una historia de amor repleto de acciones, en los tiempos modernos entre un vampiro y una humana . Bella Swan (Kristen Stewart) siempre ha sido un poco diferente, no le preocupa llevarse bien con las chicas populares en su instituto, en Phoenix. Cuando su madre vuelve a casarse, envía a Bella a vivir con su padre en la pequeña ciudad lluviosa de Forks, Washington, ella no espera mucho de nada a cambio. Entonces conoce a la misteriosa y hermosa dazzlingly Edward Cullen (Robert Pattinson), un chico diferente a cualquiera que ella habia conocido. Inteligente y divertido, él ve dentro de su alma. Pronto, Bella y Edward son arrastrados por un apasionado y decididamente poco ortodoxo romance. Edward puede correr más rápido que un león de montaña, puede detener un automóvil en movimiento con sus propias manos - y no ha envejecido desde 1918. Al igual que todos los vampiros, él es inmortal. Pero él no tiene colmillos, y no bebe sangre humana; Edward y su familia son únicos entre los vampiros en su estilo de vida elección. Para Edward, Bella es aquello que él ha esperado 90 años - un alma gemela. Pero cuanto más cercanos son, más debe luchar Edward para resistir la atracción primordial de su olor, que le podría enviar en un frenesí incontrolable. Pero que haran Edward y Bella cuando James (Cam Gigandet), Laurent (Edi Gathegi) y Victoria (Rachelle Lefevre), los enemigos mortales de los Cullen, vengan a la ciudad, en busca de ella?

domingo, 18 de enero de 2009

Ya no puedo salir.

Hay un hombre junto a la puerta

con un impermeable

fumando un cigarrillo.

Pero

Lo he anotado en mi diario

y las direcciones están todas en una columna

sobre la cama, ensangrentadas por la luz

del letrero del bar vecino.

Él sabe que si muero

(o incluso si desaparezco)

aparece el diario y todo el mundo se entera

que la CIA está en Virginia.

Quinientas etiquetas compradas en

quinientos mostradores de tiendas, todas distintas,

y quinientos cuadernos

con quinientas páginas en cada uno.

Estoy preparado

Puedo verle desde aquí.

Su cigarrillo brilla

por encima del cuello de la gabardina

y por alguna parte hay un hombre en un metro

sentado debajo de un anuncio y pensando en mi nombre.

Los hombres me han sentenciado en cuartos traseros.

Si suena el teléfono sólo hay aliento de muerte.

En el bar, al otro lado de la calle, un revólver

ha cambiado de dueño en el lavabo.

Cada bala lleva mi nombre.

Mi nombre está escrito en viejos ficheros

y buscado en las listas del depósito de cadáveres.

Mi madre ha sido investigada;

Gracias a Dios que ha muerto.

Tienen muestras de escritura

y examinan las vueltas de las pes

y las cruces de las tes.

Mi hermano está con ellos, ¿saben?

Su esposa es rusa y él

no deja de pedirme que rellene formularios.

Lo tengo en mi diario.

Escuchen...

escuchen

escuchen por favor;

deben escucharme.

Bajo la lluvia, en la parada del autobús,

negros cuervos con negros paraguas

simulan mirar sus relojes, pero

no está lloviendo. Sus ojos son dólares de plata.

Algunos son eruditos a sueldo del FBI,

la mayoría extranjeros que invaden

nuestras calles. Les engañé

salté del autobús entre la Veinticinco y Lexington

donde un taxista me miró por encima de su periódico.

En la habitación que hay sobre la mía, una vieja

ha montado una succión eléctrica en su suelo.

se lleva rayos de mi instalación eléctrica

y ahora escribo a oscuras

al resplandor del letrero del bar.

Les digo que lo .

Me mandarán un perro con manchas pardas

y una radio de telaraña en el hocico.

Lo ahogué en la fregadera y lo escribí

En la carpeta GAMMA.

Ya he dejado de mirar el buzón

Las felicitaciones son cartas-bomba.

Aléjate! ¡Maldito seas!

¡Aléjate! ¡Ya conozco a los altos!

¡Les digo que conozco a gente muy alta!)

El pequeño restaurante equipado con suelos parlantes

y la camarera dijo que era sal, pero yo conozco el arsénico

cuando me lo ponen delante. Y el gusto amarillo de la mostaza

para encubrir el amargo olor de las almendras.

He visto extrañas luces en el cielo.

Anoche, un hombre oscuro, sin rostro, se arrastró trece kilómetros

de recorrido de cloacas para salir en mi retrete, esperando

oír llamadas telefónicas a través de la endeble madera

con orejas de cromo.

Se lo digo, hombre, oigo.

Vi las huellas embarradas de sus manos

sobre la porcelana.

Ya no contesto al teléfono,

¿saben?

Se proponen inundar la tierra con mierda.

Se proponen penetrar a la fuerza.

Tienen médicos que

abogan por extrañas posturas sexuales.

Fabrican laxantes con droga

y supositorios que queman.

Saben cómo apagar el sol

con explosivos.

Yo me envuelvo en hielo... ¿saben?

Evita sus infralcances.

Conozco encantamientos y llevo amuletos.

Podéis creer que me teméis, pero podría destruiros

ahora, en cualquier momento.

En cualquier momento.

En cualquier momento.

¿Quieres un café, mi amor?

¿Les dije que ya no puedo salir?

Hay un hombre junto a la puerta

con un impermeable.